miércoles, 27 de noviembre de 2013

Sobre la Oratoria y cómo debe hablar un Sacerdote


Padre John Hollowell

Hace muy poco, Cecil Richards, cabeza de Planned Parenthood pidió a las mujeres que le mandasen videos con el lema “Yo tengo algo que decir”.
Quiero tomar la oferta aunque no sea mujer, porque creo que toda la gente en nuestro país tiene algo que decir.
Al margen de lo que te guste, Cecil, yo como Sacerdote católico y como hombre, tengo algo que decir:
Mis padres eligieron el sacrificio sobre el egoísmo, y porque eligieron darme vida, yo puedo tener algo que decir.

Vos, por supuesto, has trabajado muy duramente para que el número de los que jamás tuvieron la mínima chance de poder decir algo quedara bien por arriba de la marca de los 50 millones. Es decir, de aquellos que han sido víctimas del aborto.
Y aunque te has esforzado por mantenerlo en secreto también te has esforzado por aumentar el número de los chicos abortados por el uso de la anticoncepción y “la píldora del día después”

Gracias a…vos…muchos nunca han tenido qué decir.
Pero yo sí tengo algo qué decir: como educador de jóvenes, yo tengo algo que decir.
Y lo he dicho en aulas, en anuncios, en videos, en homilías desde el púlpito.

Yo he tenido… algo qué decir.
Como educador de gente joven puedo decirte que los volantes que pongo en mi puerta que vinculan el cáncer de mama con los anticonceptivos, y al aborto con los anticonceptivos, y el aborto con el cáncer de mama, vuelan más rápido de lo que los puedo reponer.
Nuestros jóvenes en nuestras escuelas están ansiosos por saber y ya no se conforman con alimentarse con las mentiras de tu organización. Nuestra gente joven también tiene hambre de verdades por saber cuáles son las auténticas enseñanzas de la Iglesia acerca de la sexualidad humana, y de cómo poder dar y expresar amor, el amor de sacrificio, que tiene lugar en el acto sexual.
Nuestros jóvenes realmente quieren saber, saborear ese conocimiento, y alimentarse de la Verdad.

Yo tengo algo qué decir. Y Nosotros…tenemos algo qué decir.
 Jamás hemos tenido la menor duda de que en el largo plazo, la Verdad, con V mayúscula, ciertamente prevalecerá.
Pero sin embargo seguimos luchando en el corto plazo. Nosotros creemos que nuestra Patria vale la pena, tanto como para no abandonarla. Nosotros seguimos creyendo que aún es posible ganar en el corto plazo, para ver prevalecer la Verdad, y tus mentiras expuestas.

Así que Nosotros tenemos algo qué decir. Y Yo, tengo algo qué decir.
Quizás dentro de un par de cientos de años, una sociedad diferente en una nueva civilización mirará hacia atrás y pondrá a tu organización junto con los tratantes de esclavos, los nazis o los comunistas, o cualquier otro grupo de los que siempre trataron de oprimir a la gente. Pero no nos satisface que la verdad sea expuesta en el largo plazo. Nosotros también luchamos por el corto plazo.

Así que Yo tengo algo qué decir. Y Nosotros tenemos algo qué decir.
Y yo digo esto:
 La Iglesia Católica ciertamente ha sido humillada en las décadas recientes por los pecados de ciertos sacerdotes y obispos y otras personas que actuaron en su Nombre. Hemos sido humillados por eso.
 Y fuimos llevados hasta lo más bajo. Y hemos aprendido mucho de ese sacrificio y de esa experiencia horrible.

 Yo tengo algo que decir, y entonces digo esto:
 Más les vale que nos golpeen ahora mismo.
Vos y el Presidente en la búsqueda de silenciar a la Iglesia, en búsqueda de silenciar a todos los que también creen que tienen algo que decir….
Mas vale que vos y el Presidente nos destruyan ahora mismo, porque… Cecil…. yo te prometo que aquí llega la Iglesia Católica.
Aquellos de nuestros seminarios y conventos que no han sido cooptados por tu lobby de la muerte y la mentira están hasta el tope de jóvenes ansiosos de saciar la sed de los que buscan la Verdad, y que ya están hartos de tus mentiras.
La sed de aquellos jóvenes que han visto a un tercio de su generación devastada por el aborto.
Porque otra generación ahora entra en juego y no vacilará ante tus mentiras ni se confundirá con tus medias verdades..
Cecil…yo te prometo….aquí llega la Iglesia Católica, porque vos y el Presidente y los medios mayoritarios han despertado a un gigante dormido, y los sacerdotes y obispos que en el pasado quizás se quedaron quietos ante tus mentiras engaños…eso se terminó.
 La Verdad está siendo derramada sobre la gente en todas partes…acerca de la verdadera enseñanza, acerca de la verdad sobre la vida, acerca de la verdad sobre la sexualidad humana, y de los dones que estas verdades ofrecen a toda la gente.

 Cecil…aquí llega la Iglesia…vos y tu Organización se han dispuesto como enemigos jurados de nuestra Fe desde el Principio, desde la fundadora, Margaret Sanger, de la que extrañamente jamás oímos demasiado…nosotros creemos que una Organización debería estar verdaderamente orgullosa de sus fundadores…me pregunto por qué ustedes no lo están… Nosotros siempre hemos escuchado que desde Margaret Sanger hasta vos siempre han sido los enemigos jurados de la Iglesia.
Ustedes se han puesto en oposición directa a nosotros, y aunque esa batalla quizás haya transcurrido en las sombras en el pasado, ahora estamos frente a frente y listos para la batalla.

Pero antes quiero decirte una cosa: ustedes tienen todas las ventajas imaginables, los medios de comunicación están de tu lado…. el Presidente de los Estados Unidos, está de tu lado también…así que tenés todas ventajas imaginables y aparentes a los ojos humanos…como el gigante Goliath las tuvo contra un joven muchacho, David….

Así que Yo tengo algo que decir. Y Nosotros tenemos algo que decir:
Ya hemos tenido demasiado. Y "mejor que nos aprestemos, porque no nos vamos a entender", como dijo Mohamed Ali una vez. Y tal como JRR Tolkien, el famoso novelista católico escribió una vez: “el tablero está servido, y las piezas comienzan a moverse”…FINALMENTE ESTAMOS AQUÍ, PARA LA GRAN BATALLA DE NUESTRA ERA.